lunes, 22 de junio de 2009

Empty

Desde que dejé de escribir el diario parece que no tengo mucho que decir aquí. Punto. No es que antes haya tenido mucho que decir, lo evidente es que ahora tengo que buscar “temas” y eso a veces complica, especialmente cuando sólo existe una cosa de la que quiero hablar. Es probable que algunos sepan que es, pero prefiero guardar silencio sobre ello. Es una tortura también, especialmente cuando siento que es necesario gritarlo al cielo, pero no…
Otra cosa que me molesta es este absurdo cripticismo que manejo. Yo sé que es estupido, pero es muy probable que sea una especie de mecanismo de defensa. Todos sabemos que los mecanismos de defensa nos obligan a sacrificar cosas, es como una puerta fortificada que no nos separa del peligro sino que nos encierra adentro. Lejos del mal, si; lejos de todo, también. Este misterio estupido de no decir todas las cosas, como el inicio de este post que es un claro ejemplo de lo que hablo, este mecanismo de defensa sin sentido que me encierra en mí y me aleja de lo que quiero.
Antes decía que era todo vanguardia, sin guardarme en reserva nada de lo que valerme en caso de retirada, pero me ha dado cuenta que en temas importantes, cuando quiero de verdad a alguien, soy más que retaguardia. Catenaccio. Diez hombres colgados de los palos y sólo uno buscando el gol de la victoria. Ahora estoy en un momento de mi vida donde me siento un poco vacío y el único delantero sigue cayendo una y otra vez en fuera de lugar. Aunque es un torneo largo, y si bien se han ganado y perdido partidos, aún hay tiempo de recomponer el orden táctico. Soltar los laterales, asociarse en el medio y buscar variantes ofensivas para que, poco a poco, el delantero solitario encuentre más opciones de gol. El tiempo apremia, el reloj está en contra.
Más cripticismo, espero me disculpen.

3 comentarios:

Valentina dijo...

no se siente muy bien vernos esclavos de un solo tema. no importa que no lo pongas en letras y lo publiques en tu blog, el tema seguira dando vueltas en tu cabeza. a mi me pasa verme no orgulloza de mi blog tipo agata ruiz de la prada, lleno de corazones y colores, fruto de una cursi mujer enamorada. pero eso me facilita verme real y hacerme mas conciente de mi misma...el resultado? poder reirme de mi toda la vida.

Diego Alejandro dijo...

y si querés gritarlo al cielo ¿qué te impide hacerlo?

El Mantra dijo...

Mi falta de valor supongo, las ganas de gritar están y a veces se siente el nudo en la garganta. Habrá que tomar impulso y aún así...