lunes, 12 de octubre de 2009

Camino

Algo falta, claro que algo falta. Antes faltaba pero ahora se siente. Alguien decía que lo importante era seguir, que tarde o temprano se encontraría el camino y todo iba a estar bien, pero en este preciso momento he perdido toda noción espacio temporal y, como un astronauta flotando en una capsula abandonada en el vacío, no tengo las más mínima idea de donde estoy. También tengo que decir que la amo y la voy a seguir queriendo muchísimo así sea probable que no nos volvamos a ver, y ese es otro vacío. Incluso esto, este blog, y las ganas de explicarse a uno mismo alzando la voz y los lápices y el teclado se acaba, se aburre uno porque siempre termina haciéndose lo mismo. Ahora mismo soy como una gran y maltrecha montaña rusa, llamada en Rusia montaña americana, lleno de altibajos y oxido en los rieles, empujando trabajosamente uno de los carros hacia una nueva cima, pero hay cada vez menos tuercas y tornillos que sigan sosteniendo todo junto. Lo que habrá que hacer, lo único posible, es cerrar todo por el momento y echar a los curiosos para esperar el momento en el cual una brisa leve termine el trabajo y todo esto no sea más que escombros. Es probable que sólo así, gracias al polvo levantado por la caída y el gigantesco estruendo, sepa en que punto del mapa estoy, en que punto aislado de todo me encuentro y me haga a mí mismo señas con una linterna o me tire una cuerda. Encontrarme entonces y descubrir que, aunque iba en dirección contraria y con los ojos cerrados, estaba en un camino. El camino.
Aún hay miles de cosas por hacer.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Algo falta! :(